¿Te has parado a pensar si tienes tú algo que ver cuando tus hijos tienen problemas emocionales, de salud o de comportamiento?
Todo eso no son sólo cosa de ellos
Lo que no queremos o no podemos abordar acabará recayendo más tarde o más temprano sobre las personas nos rodean.
Me atrevo a decir entonces que desde un punto de vita ético y moral, somos responsables de acometer nuestra tarea personal a menos que queramos cargar nuestro peso sobre las personas a las que cuidamos.
<< LEY ELEMENTAL DE LA PSICOLOGÍA: AQUELLO A LO QUE NO SE ENFRENTA EL PADRE/MADRE, CAERÁ SOBRE EL HIJO EN SU DEBIDO MOMENTO >>
<<<Para reflexionar: TODOS SOMOS HIJOS AUNQUE NO SEAMOS PADRES>>>
La proyección inconsciente: Entendiendo el Efecto Espejo en la familia
La vida es curativa por naturaleza
La vida continuamente nos pone “maestros” a nuestro alrededor para que seamos capaces de ver cosas (que son propias) pero que nuestro ojo no puede ver en nosotros mismos.
Para el inconsciente: “el otro no existe”, tú y “el otro” sois uno mismo. ¿No te parece de gran utilidad conocer esto?…
Nuestra pareja y sobre todo nuestros hijos son las personas en las que más “proyectamos” aquello de lo que no somos conscientes (aquello que no reconocemos, no queremos reconocer o nos da mucho miedo). Es decir, nuestra sombra, (nuestros aspectos ocultos o inconscientes) la vemos reflejada en los demás. Ellos nos hacen de espejo.
Reconocer nuestra sombra: El primer paso hacia la sanación
Por supuesto que no todo, absolutamente todo lo que vemos en el otro, es nuestro.
Para detectarlo te cuento un truco… Lo que es nuestro es “algo” que:
- no podemos soportar del otro,
- que nos provoca una reacción desmesurada,
- algo que nos da terror…
- algo que te cierra el estómago literal, que hace que tu cuerpo se tense…
Te doy más pistas… Reconoce por un momento cuántas veces escuchas:
- “este crio es como su padre…”,
- “es tan perfeccionista como su madre…”,
- o tú misma diciendo “mi hijo tiene miedo a X como yo”…
Siento decirte que no es verdad. Éstas no son características suyas. Y si no son suyas… ¿De quién son?
Te invito a que observes y dime qué descubres.
Hacerte cargo de tus heridas emocionales, libera a tus hijos de “tus cosas”
A mi en su momento me pareció maravilloso conocer que si trabajaba esas partes haciéndome cargo de que son mías (es decir haciendo consciente eso que tenía en mi inconsciente y que por tanto lo proyectaba en mi hija sin saberlo), podría liberarla de mis cosas:
- de mis miedos
- de mis comportamientos y emociones reprimidas
- de mis roles en la vida
- de mis problemas…
y permitirle vivir SU vida.
<<LOS BENEFICIOS DE ESTE TRABAJO NO SE LIMITAN ÚNICAMENTE A TU BIENESTAR SINO TAMBIÉN AL DE LAS PERSONAS A LAS QUE AMAS>>
Abraza un futuro de Crianza Consciente y Salud Emocional
Ya no solo es que el trabajo terapéutico de hacer consciente lo inconsciente te permita estar más serena, coherente y equilibrada contigo misma al conocer tus luces y tus sombras, sino que además liberas de una carga terrible a tus hijos, a las personas que más quieres.
MARAVILLA DE TRABAJO.